jueves, 21 de junio de 2012

LA HISTORIA SIN FIN (y el por que sufrimos tanto)


Dicen que el problema de muchos seres humanos es la falta de memoria, agregaría la ingratitud.
Mi esposo, -militante de toda la vida-, recuerda que fueron muchos de los hijos de trabajadores que, gracias al peronismo accedieron a la universidad, los que luego se prestaron a la destitución del General. Pareciera que algunos hombres y mujeres, cuando acceden a lo anhelado, se avergüenzan del pasado obrero y deciden golpear a los sometidos para que no les recuerden su propia historia. Deformaciones de alguna clase media.
Cínicamente entonces, se alían a las clases dominantes que fueron sus opresores, imaginando quizás que esta complicidad traidora los ayudara a acceder al mundo soñado. Sucede también (desgraciadamente) en algunos trabajadores que escalan hasta lugares de importancia en sus sindicatos y se enriquecen de tal manera que entonces se creen candidatos naturales  del poder total, dejando de lado convicciones de ayer, para hoy convertirse en los títeres del stablishment.
 Hemos visto –y estudiado- como se repiten las historias en el largo camino de la humanidad. Pero intentamos una y otra vez revertir la injusticia en favor de los pueblos.
En el 2001 el país explotaba en pedazos. No solo el hambre, también la muerte regó las calles de nuestra Argentina. Faltaba el trabajo, los jubilados ganaban 150$, y únicamente por las ollas populares muchos compatriotas podían comer 1 vez al día.
La clase media y mucha clase alta perdió sus ahorros a manos de los banqueros mediante los favores de Cavallo. Los genocidas pululaban por todas partes, por el favor del nefasto gobierno menemista.  
A partir de la llegada de Néstor y Cristina nuestro mundo cambió. ¿Hace falta enumerar los logros? No creo, quien lo ignora es porque decide hacerlo.
Hoy nuestra Patria es Grande y Digna, acompañada y acompañando a nuestros países hermanos. Pero como alguna vez el gran Fidel le previno a Allende, “la garra del imperialismo siempre acecha”. Hoy Lugo en Paraguay está soportando el intento de destitución. Aquí se ha formado una nueva sociedad, Magnetto/Scioli/Alberto Fernández/la Sociedad Rural/Buzzi/etcssssssss con la cara y la decisión rupturista y desestabilizadora de Hugo Moyano. ¡Son inteligentes los servicios!
Lo terrible es el acompañamiento de la CGT hacia un paro nacional y movilización en donde convergen diferentes sindicatos. Siempre serán los trabajadores –para el peronismo y el progresismo real- la columna vertebral de un país en serio. Pero algunos de sus referentes actúan como sicarios de los poderes oligárquicos promoviendo con mentiras el veneno y la desconfianza en muchos de sus afiliados. Hay una ley del impuesto al trabajo que se debe dejar de lado, el gobierno pensaba hacerlo en julio, y Moyano lo sabía. Pero los constantes logros de Cristina Fernández en las políticas sociales, habitacionales e internacionales les quito esa chance de ser él, o Scioli, los candidatos para el 2015. Magnetto por otro lado se apura e intenta malograr estas políticas para antes del 7 de diciembre.  
Conmociona escuchar de parte de algunos compatriotas las críticas hacia la persona de Cristina o del gobierno en su conjunto. Que se cuestionen los zapatos de calidad de la Presidenta nos remite a los criticados vestidos de Eva Perón. Una sabia amiga me decía hoy:
“Esta gran mujer perdió a su compañero y pese al tremendo desgarro sigue luchando, nunca se toma vacaciones en tanto Macri vive viajando sin que nadie le diga nada. Podría –cansada de tanta ingratitud- comprarse una isla, ponerle de nombre Néstor Kirchner y no dejar entrar a nadie, sin embargo sigue adelante. Pelea por los pobres, por los trabajadores, se enfrente al colonialismo inglés, participa del G20 con una altura pocas vece vista y hoy, tiene que volver de un importante encuentro en Brasil por el capricho y la ambición de un osado y millonario dirigente sindical cuyo hijo (que nunca trabajó) se atreve a dirigirse a ella con irrespetuosidad absoluta”.
El enojo de mi amiga es grande, el mío también, y el de muchísimos; justamente por la falta de memoria a la que nos referíamos.
Hoy se están agrupando, suponen que pueden extorsionar y asustar con un paro y movilización para el miércoles próximo, pretenden llenar plaza de mayo –esa plaza del pueblo- para demostrar que ya no la amamos. Pero es inútil esta vez.
De este lado estamos los militantes comprometidos, los pobres que por fin comen y envían a sus chicos al colegio, las madres que reciben la AUH, los docentes de buena fe, los obreros de las fabricas recuperadas, las Pyme, los jubilados que reciben aumento dos veces por año y acceden a la medicina gratuita, los artistas e intelectuales comprometidos, los periodistas militantes de las causas justas, las organizaciones sindicales, políticas, sociales y barriales que defienden un modelo que nos incluye a todos.  Los jóvenes organizados políticamente. Los hijos, nietos, madres y abuelas de Plaza de Mayo. Y muchos más.
Aquí estamos, de Pie, unidos y organizados, preocupados tal vez pero no asustados, sabiendo que esta es nuestra oportunidad y que, ni por la derecha miserable, ni por la izquierda cipaya van a corrernos nunca más.

                                                          Lorena Cormick Periodista-Escritora

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